Las V-Lovers se apoderan de las calles
italianas. Con sus vinchas y sus cartulinas, en las que brillan
corazones de papel brillante y colores vivos, repiten a lo largo de ocho
ciudades desde principios de enero el multitudinario ritual de devoción
a la nueva gran ídola de las adolescentes peninsulares.
La destinataria de esta impresionante ola de fervor no
es otra que Martina Stoessel, que demuestra en este tramo de su gira
internacional que Violetta
es un éxito globalizado en toda la expresión del término. Las fans no
hacen más que agotar las entradas que se ponen a la venta en cada ciudad
italiana, por las que se llegaron a pagar hasta 300 euros cada una.
Esto ocurrió en Roma, donde esta tarde concluye una serie de cinco
conciertos a sala llena iniciado anteayer en el Palazzo dello Sport, con
capacidad para 12.000 espectadores. Hasta allí llegaron muchos famosos
con sus hijos, con el ídolo futbolístico local Francesco Totti a la
cabeza. El valor oficial de los tickets va de los 44 a los 247 euros,
baratos si los comparamos con lo que costará ver a Violetta en París el sábado 18: allí las localidades cuestan entre 199 y 299 euros.
El espectáculo que se presenta en Italia es el mismo
que se estrenó en Buenos Aires (con 77 funciones y 250.000 localidades
vendidas en el Gran Rex) y siguió por el interior argentino y por varios
países de América latina. El tour incluye 57 conciertos en 12 países y
se cerrará en el Luna Park, con presentaciones del 28 de febrero al 4 de
marzo. A Italia, Stoessel llegó con el elenco completo de su show, que
incluye a dos créditos locales: Lodovica Comello (Francesca) y Ruggero
Pasquarelli (Federico).
Hace unos días, en el Corriere della Sera, se hablaba de Martina Stoessel y de Violetta
como un éxito sin precedente nacido en la televisión (el programa se
emite en Italia por el Disney Channel local y la RAI Gulp, canal digital
de la televisión pública destinado al público infantil) que ni siquiera
Miley Cyrus está en condiciones de emular. "Sin dudas -señala una nota
firmada por Alessandro Sala- , Violetta fue la protagonista de
la Navidad de los más jóvenes." La imagen del personaje interpretado
por Stoessel ya está instalada en buena parte de los hogares italianos
gracias a un omnipresente merchandising : toda clase de líneas
de ropa, set de maquillaje, libros, diarios, álbumes de figuritas,
toallas, micrófonos, calendarios y juguetes, entre los cuales se
destaca una muñeca símil Barbie con su figura.
La presencia de la intérprete en Italia se inició en
pleno festejo de Año Nuevo con una participación especial en la gala
televisiva L'anno che verrá , emitido por la primera cadena de
la RAI con récord de audiencia. También aprovechó la audiencia general
del último miércoles en el Vaticano para saludar, junto con Peter
Lanzani, su novio, al papa Francisco. Sus fans la aguardan en todas
partes. Cada actuación de Violetta en Italia tiene nombre propio: es el
V-Day
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